ALTEN inicia 2021 con un ERE.

La empresa nos ha citado el próximo lunes para iniciar negociaciones sobre un nuevo expediente de regulación de empleo (ERE).

Esta medida se suma a cuatro ERTES realizados durante 2020: dos por fuerza mayor, uno de ellos rechazado por la autoridad laboral, y dos negociados con la representación de los trabajadores y trabajadoras.

En CCOO confiábamos en la efectividad de esas medidas para impedir otras más drásticas. Además así nos lo comunicó en su día la empresa, indicando que estaban tratando de que con la medida de los ERTES no fuera necesario en un futuro tomar medidas más drásticas como podrían ser los ERE.  Por ello llegamos a un acuerdo con la empresa en dos ocasiones, creemos que beneficioso para las personas afectadas dentro de las circunstancias.

Sin embargo, la empresa nos ha comentado que no ha utilizado las ayudas del gobierno para los ERTES, en base a las cuales si optaban a dichas medidas tenían que garantizar el empleo durante 6 meses para las personas del ERTE. Es decir, mientras en la reunión nos estaban diciendo que estaban tratando de evitar medidas más drásticas, dichas medidas ya las tenían 100% decididas y cerradas al no acogerse a ninguna ayuda estatal como sí han hecho otras empresas.

De hecho, ahora nos dicen que no ha sido suficiente y que Alten «necesita» despedir a casi 200 personas «imposibles de recolocar» tras la pérdida de algunos proyectos. No es necesario mencionar que tal despido colectivo nos parece fuera de lugar porque consideramos otras alternativas menos dañinas para la plantilla de Alten y sus familias. Plantearemos durante la negociación, en primer lugar, que Alten retire el ERE (haciendo quizá honor al distintivo «Top Employer»); y, en otro caso, procuraremos que se consideren esas alternativas a los despidos que ahora están sobre la mesa.

Os informaremos de las novedades que vayan surgiendo en esta negociación, que finalizará el próximo 3 de febrero.